En Badajoz, encontrar un sitio donde comer de maravilla y sin que la cartera se resienta, es casi como encontrar un pequeño tesoro. La verdad es que es mucho más fácil de lo que uno imagina. La ciudad presume de un arraigado sabor a tradición y recetas caseras, y lo mejor es que muchas veces puedes sentarte a la mesa, disfrutar de un menú completísimo, bebida incluida y tu cafelito, por menos de 20 euros. Por todas partes surgen bares de tapas con raciones que parecen pensadas para quienes no se quedan nunca con hambre, y también hay restaurantes de toda la vida donde la hospitalidad no es postiza. No importa si buscas solamente picar algo rápido o prefieres una comida larga y tranquila con sobremesa: aquí tienes opciones para todos los gustos y bolsillos.
Dónde comer bien y barato en Badajoz por menos de 20 euros
Seguro que te interesa saber nombres concretos. Por suerte, hay varios sitios en Badajoz que casi todos los locales recomiendan sin dudar. Este puñado de bares y restaurantes, que parecen contentar a todo el mundo, han conquistado a la clientela por su cocina casera, trato sencillo y cercano, y sobre todo por ese equilibrio entre lo que pagas y lo que recibes, algo que no se ve todos los días.

Los Primos: tapas generosas en la Margen Derecha
Por cierto, si llevas mucha hambre, Los Primos, en la Avenida Augusto Vázquez, 12, parece hecho para ti. Sus tapas son de esas que sorprenden: empiezan por tan solo 3,50 euros y, honestamente, es difícil quedarse con hambre aquí. El local tiene un ambiente cálido, ideal para ir en familia y sobre todo con niños, porque hasta los más pequeñines pueden moverse a sus anchas en la zona de veladores. Curiosamente, la fama de este sitio no es gratis: conviene reservar para garantizar mesa. Nadie quiere ir y quedarse fuera, claro.

Más Cosas: cocina tradicional en la estación de tren
Ahora bien, para los que prefieren un lugar con horarios amplios, Más Cosas hace muy bien su papel. Esta cafetería-restaurante en la Avenida Carolina Coronado del mismo edificio de la estación de tren, también conquista a quienes viajan y a los que no. Ofrece sugerentes recetas tradicionales pero, de vez en cuando, se lanzan con platos algo más modernos. No faltan las opiniones positivas sobre la amable atención y la flexibilidad del local: lo mismo puedes ir sólo a por un café, desayunar antes de empezar la jornada o sentarte sin complicaciones para una comida contundente. ¡Y el precio es imbatible!
Casa Romy: sabor casero en dos ubicaciones
Quienes buscan el calorcito de barrio no necesitan mirar mucho más allá de Casa Romy. Este bar de aire familiar, con locales en la Calle La Maya, 4, y Plaza Santa María de la Cabeza, 3, tiene una clientela entregada a sus platos de toda la vida. Allí, el cachopo o el bacalao a la nata ya casi se consideran vecinos del lugar. Cenar allí después de un día largo te hace sentir parte de la familia, todo en un ambiente relajado donde nada parece forzado y con precios realmente justos.

Don Café: el menú del día que no falla
¿Buscas un menú del día variado y abundante? Don Café, en Calle Fuerte, 31, nunca decepciona. Es un sitio tranquilo y sin pretensiones, pero resulta siempre eficiente y cálido. La mayoría de sus clientes acuden por el menú, que cambia y sorprende, e incluye platos caseros de cuchara y casquería que no se ven mucho ya. A los trabajadores del barrio les encanta y muchos lo consideran el sitio indispensable para el almuerzo o la cena de la semana. Por cierto, la atención aquí hace que te sientas invitado especial, aunque solo vayas por la comida.
Casa Rosendo: fusión peruana y extremeña a buen precio
Por otro lado, quien tenga curiosidad y ganas de probar mezclas originales debería acercarse a Casa Rosendo, en la Calle Felipe Checa, 22. Aquí, la comida peruana se da la mano con la extremeña y los resultados, sorprendentemente buenos, se ajustan a todos los bolsillos. Probar una causa limeña en pleno centro de Badajoz por menos de veinte euros no se encuentra todos los días. Una elección original si buscas salir de lo clásico sin arruinarte.

Qué tipo de comida económica encontrarás
Lo más habitual al buscar restaurantes baratos en Badajoz es toparte con locales de fuerte personalidad, donde el sabor auténtico y la cantidad se fusionan casi como si fueran hermanos. Realmente, no hay dos iguales aunque compartan esencia:
- Bares familiares de barrio: Aquí reinan las comidas mimadas y llenas de recuerdos, como en Casa Romy o Don Café, donde los platos tradicionales y las sopas caseras dominan el menú. Siempre encuentras un ambiente cercano, casi como volver a la casa de tu abuela, vaya.
- Bares de tapas contundentes: El formato de tapa es casi religión local. Lugares como Los Primos demuestran que a veces solo necesitas una tapa para quedar más que satisfecho. Es la alternativa favorita si buscas algo rápido y divertido con amigos.
- Cafeterías-restaurantes polivalentes: Sitios como Más Cosas cubren todas las franjas del día, desde cafés tempraneros, pasando por comidas inesperadas, hasta cenas improvisadas. Una opción muy flexible cuando no sabes bien lo que quieres pero sí lo que no.
- Restaurantes innovadores pero asequibles: Aunque menos frecuentes, propuestas como la de Casa Rosendo confirman que se puede innovar sin que el precio se vaya por las nubes. Aquí los sabores cruzan fronteras sin asustar a tu bolsillo.

Guía rápida de precios y especialidades
Para no enredarse pensando dónde reservar, aquí tienes una tabla práctica con los detalles que de verdad interesan: cuál es el plato estrella, cuánto cuesta comer y qué no deberías dejar escapar.
Restaurante | Precio orientativo | Especialidad destacada |
---|---|---|
Los Primos | Tapas desde 3,50 € | Solomillo al ajo tostado, brochetas |
Más Cosas | Menú del día y raciones | Cocina tradicional, buena atención |
Casa Romy | Platos principales 12-16 € | Cachopo a la napolitana, arroz caldoso |
Don Café | Menú del día por 12 € aprox. | Platos de cuchara, casquería |
Casa Rosendo | Plato medio por 10 € | Causa limeña, fusión peruana-extremeña |
¿Qué platos no te puedes perder?
No hace falta ser crítico gastronómico para saber que hay platos aquí que merecen una ovación. En Casa Romy, sin dudarlo, el cachopo a la napolitana es de los que provocan suspiros y el arroz caldoso de marisco deja con ganas de repetir. Si lo tuyo es la carne, pásate por Los Primos y pide el solomillo al ajo tostado, uno de sus mayores éxitos. Y si te animas a experimentar, Casa Rosendo tiene la causa limeña, tan rica que muchos acaban volviendo solo por ese plato. Realmente, en cada restaurante hay una pequeña joya esperando.

Horarios y ubicación: planifica tu visita
Porque nadie quiere quedarse con las ganas por llegar a destiempo, aquí recopilamos direcciones y horarios para que tu próxima comida, merienda o cena salga redonda. Así es mucho más sencillo organizar la ruta gastronómica:
Los Primos
- Dirección: Av. Augusto Vázquez, 12, 06006 Badajoz.
- Horario: Martes a sábado de 9:00 a 1:00; domingos de 9:30 a 17:00. Cierra los lunes.
Más Cosas
- Dirección: Estación de Trenes, Av. Carolina Coronado, 06007 Badajoz.
- Horario: Lunes a viernes de 6:00 a 00:00; sábados de 7:30 a 00:00; domingos de 7:30 a 17:00.
Casa Romy
- Dirección 1: Calle de la Maya, 4, 06003 Badajoz.
- Horario: Martes a sábado de 11:30 a 00:00; domingos de 11:30 a 18:00. Cierra los lunes.
- Dirección 2: Plaza Santa María de la Cabeza, 3, Badajoz (horario no oficial, es mejor consultar antes).
Don Café
- Dirección: Calle Fuerte, 31, 06010 Badajoz.
- Horario: Lunes a viernes de 8:00 a 00:00; sábados de 9:00 a 17:00. Cierra los domingos.
Casa Rosendo
- Dirección: Calle Felipe Checa, 22, 06001 Badajoz.
- Horario: A falta de información oficial, lo más práctico es consultar directamente con el bar.

Así que, como conclusión inevitable, Badajoz es de esos pocos lugares donde se demuestra que comer bien y gastar poco no es incompatible. En sus bares y restaurantes, la generosidad abunda (en las raciones y en el trato), los sabores son sinceros y, lo que resulta más agradable, ese ambiente cercano invita a quedarse. El verdadero truco está en saber buscar y dejarse aconsejar, porque esas joyas ocultas que dan tanto por tan poco siempre están esperando al comensal curioso.
Por tanto, da igual si prefieres compartir unas tapas con la pandilla, lanzarte a por un menú del día bien servido o sentarte a cenar sin prisas en familia, porque aquí seguro que encuentras lo que buscas sin arruinarte. Y lo cierto es que visitar estos sitios es mucho más que ahorrar: es sumergirse de lleno en el sabor genuino de la cocina de Badajoz, esa que, honestamente, todos queremos descubrir y recordar siempre con alegría.

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